El estrés no es ni positivo ni negativo, es energía de adaptación.

El cuerpo humano experimenta cambios cuando se somete a una situación percibida como amenazante (p.e. tirarse de un paracaídas) ; sin embargo,   no es lo que nos sucede,  sino la forma en la que reaccionamos ante lo que nos sucede.

 Sí un estímulo se prolonga, genera reacciones en el cuerpo de estrés (distrés control dañino o perdida de la energía vital ). La fórmula clave para mantener la vitalidad es el EQUILIBRIO entre la satisfacción por la energía gastada.

Investigaciones  revelan que hay cinco habilidades vitales efectivas en gestionar el estrés y aumentar la vitalidad.

1.        Aclaración de objetivos

2.       Relajación

3.       Relaciones gratificantes y asertivas

4.      Nutrición energética

5.       Buena forma física

Cuando algo te preocupe, tomate una siesta.  El sueño es bueno para resolver problemas de la creatividad.